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Anestesia epidural en el parto

anestesia epidural en el parto

Tiempo de lectura: 5 minutos

La anestesia epidural evita el dolor durante el parto sin que la paciente se duerma. Puede usarse para aliviar el dolor durante el parto y también se puede adaptar para aliviar el dolor durante una cesárea.

La anestesia epidural implica el uso de anestesia local y a veces también otros medicamentos para aliviar el dolor, y se inyecta en la región lumbar, justo por encima de la cintura. Después de que se inyecte la anestesia, no debe sentir ningún dolor en el abdomen (barriga) ni en la parte superior de las piernas.

¿Cómo funciona la anestesia epidural?

La médula espinal recorre un canal formado por las vértebras (los huesos de la columna vertebral) y está rodeada de tres capas protectoras de tejido llamadas meninges. Hay una capa protectora de fluido entre dos de esas capas de tejido (se le llama líquido cefalorraquídeo o LCR). El área alrededor de todas estas capas se llama espacio epidural.

La médula espinal conduce señales, en forma de impulsos eléctricos, entre el cerebro y la red de nervios que se ramifican hacia fuera de la columna vertebral a todas partes del cuerpo. A cada nivel de la columna vertebral, salen nervios de la médula espinal que se dirigen a partes específicas del cuerpo. Por ejemplo, los nervios de la parte 
inferior del cuerpo se unen a la médula espinal en la región lumbar.

El anestesista inyectará la anestesia local en el espacio epidural localizado en la región lumbar. Esto bloquea en la columna vertebral a los nervios que se dirigen a la parte inferior del cuerpo e impide que usted sienta dolor. El anestesista puede controlar cuánta sensibilidad se pierde, según la cantidad y el tipo de medicamentos usados. La cesárea puede hacerse con anestesia epidural, sin necesidad de usar anestesia general.

Generalmente la anestesia epidural es muy eficaz, pero tarda cerca de 30 minutos en hacer efecto. Si le administran anestesia epidural, la segunda etapa del trabajo de parto se puede alargar debido a que no sentirá la urgencia de pujar. Además, le podría hacer más difícil moverse de un lado para otro, ya que tendrá menos sensibilidad en la espalda y las piernas. Sin embargo, pueden aplicarle anestesia epidural ambulante. En este caso se aplica una dosis menor de anestesia local con un analgésico opiáceo. Esto permite a la paciente caminar y acomodarse en distintas posiciones que faciliten el parto.

¿Cuáles son las alternativas a la anestesia epidural?

Si no desea someterse a una anestesia epidural, existen otros métodos para aliviar el dolor que usted puede probar. Consulte con la partera o el médico sobre los riesgos y beneficios de estos métodos.

  • Gas y aire (Entonox). Es una mezcla de óxido nitroso y oxígeno que actúa como un analgésico ligero. Cuando siente que tendrá una contracción, inhala la mezcla a través de una boquilla o máscara colocada sobre la nariz. Probablemente hará que las contracciones sean menos dolorosas, aunque no a todas las mujeres les resulta eficaz. A veces puede hacerle sentir náuseas o mareada por un corto período de tiempo.
  • Medicamentos opiáceos. Estos medicamentos incluyen la diamorfina, la morfina y la petidina. Los opiáceos suelen ser administrados por la partera, quien los inyecta en un músculo grande del brazo o de la pierna. El alivio del dolor a menudo es limitado y algunos efectos secundarios son las náuseas, los mareos o la somnolencia. Los medicamentos opiáceos también pueden hacer que el bebé se sienta soñoliento y a veces pueden reducir temporalmente la capacidad del bebé para respirar al nacer.
  • Electroestimulación nerviosa transcutánea (TENS, por sus siglas en inglés). Se colocan cuatro electrodos en la espalda y se envían impulsos eléctricos a los nervios para bloquear la señal de dolor que va del útero (matriz) al cerebro. Se puede variar la intensidad de los impulsos eléctricos para ayudar a controlar el dolor. La electroestimulación nerviosa transcutánea se usa frecuentemente al principio del trabajo de parto y puede resultar menos eficaz a medida que avanza el trabajo de parto.

La disponibilidad y el uso de los medicamentos puede variar de un país a otro.

Cómo se aplica una anestesia epidural

El anestesista le explicará qué ocurrirá antes, durante y después de la anestesia epidural, y cualquier dolor que usted pueda sentir. Esta es su oportunidad para entender lo que sucederá, y puede resultarle útil preparar una lista de preguntas sobre los riesgos, los beneficios y las alternativas al procedimiento. Esto le ayudará a estar informada, de modo que pueda dar su consentimiento si le piden que firme un formulario de consentimiento para llevar a cabo el procedimiento.

La anestesia epidural no es aconsejable si tiene problemas de coagulación. Debe decirle a la partera o al anestesista si usted está tomando anticoagulantes, como aspirina, warfarina o clopidogrel. La anestesia epidural no es aconsejable si ha tenido una operación en la espalda. Consulte con la partera o el anestesista para obtener más información.

Antes de que el anestesista le administre la anestesia epidural, le insertará un tubo delgado (cánula) en una vena de la mano o del brazo. Quizá también le hagan administración por goteo intravenoso. Esto puede utilizarse para administrarle líquidos y medicamentos que pudiera necesitar durante el trabajo de parto. La tensión arterial y el pulso serán monitoreados mientras el anestesista administra la anestesia epidural y en todo momento que se renueve la dosis. También se monitoreará al bebé para garantizar que esté seguro/a durante el parto.

Qué sucede durante una anestesia epidural

Se le pedirá que se acueste de lado, con las rodillas pegadas al abdomen y el mentón hacia adentro, o que se siente en la cama y se incline hacia adelante. Ambas posiciones abren el espacio entre las vértebras.

Dónde se coloca la anestesia epidural

El anestesista seleccionará con cuidado un punto para inyectar buscando al tacto los huesos correspondientes en la columna vertebral y la cadera. Podría marcar este sitio con un bolígrafo para mostrar dónde insertar la aguja. El anestesista le limpiará la piel de la espalda con solución esterilizadora y le aplicará una inyección de anestesia local en los tejidos de esta zona. También le cubrirá la espalda con una venda esterilizada, con un orificio cuadrado en el lugar donde se aplicará la anestesia epidural.

Cuando la piel se insensibilice, el anestesista introducirá una aguja hueca más larga en el espacio epidural. Cuando la aguja alcance el punto correcto, el anestesista insertará un tubo plástico delgado (catéter) a través del centro de la aguja. Luego sacará la aguja y dejará el catéter que comunicará el espacio epidural con el exterior del cuerpo. El catéter se mantiene en su lugar con cinta adhesiva.

¿La anestesia epidural duele?

El anestesista usará el catéter para inyectar anestesia local y/u otros medicamentos para aliviar el dolor directamente en el espacio epidural. Transcurridos unos 15 o 20 minutos, el anestesista confirmará si la anestesia epidural ha surtido efecto comprobando la sensibilidad de las piernas de la paciente al frío, por ejemplo con un cubo de hielo, o con un pinchazo.

El anestesista podría agregar una bomba al catéter para poder renovar la dosis según sea necesario. Se le podría permitir controlar la bomba a usted misma. A esto se le llama analgesia epidural controlada por la paciente o PCEA, por sus siglas en inglés.

Es importante permanecer inmóvil mientras el anestesista prepara el sitio para la inyección epidural, especialmente mientras se inserta la aguja epidural. Todo movimiento dificulta la colocación de la aguja.

Cuando ya no necesite más aliviar el dolor, el catéter se retirará cuidadosamente y el área se cubrirá con un esparadrapo.

¿Cuánto dura la anestesia epidural?

Es posible que no pueda sentir ni mover las piernas durante algunas horas.
Después de someterse a la anestesia epidural, deberá descansar hasta que se le pase el efecto de la anestesia.

¿Cuáles son los riesgos de la anestesia epidural?

La anestesia epidural es un procedimiento frecuente y, por lo general, seguro. Sin embargo, para poder tomar una decisión informada y dar su consentimiento, usted debe estar al tanto de los posibles efectos secundarios y del riesgo de complicaciones que conlleva este procedimiento.

Efectos secundarios de la anestesia epidural

Como en todo procedimiento, existen algunos riesgos relacionados con la anestesia epidural. Las probabilidades de que dichos riesgos sucedan son específicas a cada paciente y varían según cada persona. Consulte al cirujano o anestesista para que le explique cómo estos riesgos se aplican a su caso.

Los efectos secundarios comunes se enumeran a continuación:

  • Disminución de la tensión arterial. Le controlarán la tensión arterial regularmente. Si disminuye, es posible que le den medicamentos para elevarla al nivel normal.
  • Pérdida de fuerza o de control de los músculos de las piernas. La fuerza muscular se recuperará paulatinamente una vez concluida la anestesia epidural.
  • Dificultad para orinar. Quizá necesite que le coloquen un catéter para drenar la orina de la vejiga a una bolsa, hasta que pasen los efectos de la anestesia epidural.
  • Picazón en la piel. Puede presentarse al tomar algunos medicamentos, en cuyo caso el anestesista los cambiará para aliviarla.

Complicaciones de la anestesia epidural

Estas ocurren cuando surgen problemas durante o después de la anestesia epidural. La mayoría de las mujeres no se ven afectadas. Con cualquier procedimiento que implique el uso de anestesia, hay un riesgo muy leve de que se presente una reacción inesperada a la anestesia. Las complicaciones específicas a la anestesia epidural no son comunes, pero pueden incluir las siguientes:

  • Dolor de cabeza. Al aplicar anestesia epidural se podría perforar la membrana que cubre su médula espinal y el líquido puede filtrarse. A ello se le llama punción dural, la cual puede causar dolores de cabeza. Los dolores de cabeza pueden durar hasta una semana, a veces más, y si son agudos podría necesitar otro tratamiento. Podría necesitar un parche sanguíneo epidural, que significa que se toma un poco de su sangre y se le inyecta cerca de la punción, donde se coagulará y sellará el orificio.
  • Parto asistido. Usted podría tener dificultades para pujar. Es posible que su partera o médico necesite usar pinzas, una ventosa (extracción por vacío) o alguna asistencia similar para ayudarla a dar a luz.
  • Infección en la espalda. No es común porque su piel se limpia antes de insertar la aguja esterilizada. Ocurre en una de cada 100.000 mujeres. Si se le presenta una infección, se retirará el catéter, se drenará el área infectada y usted deberá tomar antibióticos. Si le da fiebre después de haber regresado a casa, llame al hospital o a su médico de cabecera, pues podría tener una infección.
  • Entumecimiento prolongado. Aunque es algo infrecuente, podría tener áreas temporalmente entumecidas; esto ocurre en una de cada 1.000 mujeres. El daño permanente, como parálisis (pérdida completa de la sensibilidad y el movimiento) es supremamente raro, esto ocurre en cuatro de cada millón de mujeres.

Preguntas y respuestas

Sí, todavía puede pujar pero la anestesia epidural le hará más difícil 'sentir' cuándo debe pujar. La anestesia epidural también podría afectar la fuerza con que usted puede pujar.

Explicación

Una anestesia epidural no le impedirá pujar para hacer salir a su bebé durante el parto, pero le impedirá sentir la necesidad de pujar. Esto significa que usted podría tener dificultades para 'sentir' cuándo debe pujar. La anestesia epidural también podría afectar la fuerza con que usted puede pujar. Debido a ello podría tardar más en dar a luz. Si su trabajo de parto se prolonga demasiado, es posible que esté demasiado cansada para pujar.

Su partera podría sugerir interrumpir la anestesia epidural cuando llegue el momento de pujar. Interrumpir la anestesia epidural le ayudará a sentir la necesidad de pujar pero también comenzará a sentir el dolor de sus contracciones.
Su partera o médico podría usar pinzas o una ventosa para ayudarla a dar a luz, si se le dificulta pujar con fuerza. Estas son pinzas grandes con extremos curvados que encajan alrededor de la cabeza del bebé. Su médico o partera tirará suavemente mientras usted puja. Una ventosa (extracción por vacío) se vale de la succión. Se coloca una copa unida a una máquina de aspiración sobre la cabeza del bebé. Se extrae el aire, lo que une la copa con fuerza a la cabeza de su bebé. Su partera o médico tirará entonces de la copa mientras usted puja.


¿Necesito decidir si recibo anestesia epidural antes de ir al hospital, o puedo decidirlo mientras doy a luz?

Información adicional

National Childbirth Trust
0300 330 0772
www.nct.org.uk

Emma's diary
https://www.emmasdiary.co.uk/

Fuentes

Info centre – Caesarean birth. National Childbirth Trust. www.nct.com

Epidurals. The Birth Trauma Association. www.birthtraumaassociation.org.uk
Pain relief in labour. Obstetric Anaesthetists’ Association. www.oaa-anaes.ac.uk

 

Esta información fue publicada por el equipo de Bupa de información sobre la salud, y está basada en fuentes acreditadas de evidencia médica. Ha sido sometida a revisión por pares, por parte de médicos de Bupa. Este contenido se presenta únicamente con fines de información general, y no reemplaza la necesidad de consulta personal con un profesional de la salud calificado.

Fecha de publicación: 2020