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Síndrome de fatiga crónica

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Síndrome de fatiga crónica

Tiempo de lectura: 3 minutos

El síndrome de fatiga crónica es un conjunto de enfermedades que causan cansancio físico y mental extremos que interfieren seriamente en la vida diaria de una persona.

Acerca del síndrome de fatiga crónica

El síndrome de fatiga crónica también se conoce como encefalomielitis miálgica, SFC/EM o síndrome de fatiga postviral (SFPV). Es una enfermedad que causa un cansancio intenso que no mejora después de descansar. Puede suceder después de una infección, o menos frecuentemente, después de un trauma, como un accidente o una cirugía.

El síndrome de fatiga crónica es una enfermedad genuina y debilitante a largo plazo. Sin embargo, no hay certeza acerca de las causas y los síntomas que tienen las personas afectadas ya que pueden variar ampliamente.

El síndrome de fatiga crónica es más común en mujeres que en hombres y usted tiene mayor probabilidad de desarrollar la enfermedad al envejecer. Puede afectar a los niños, aunque es poco probable que afecte a menores de 10 años. En general, afecta a menores de entre 13 y 15 años.

La enfermedad afecta a las personas de distintas formas. Si los síntomas de la enfermedad son leves, las personas pueden continuar con su trabajo o estudios, pero podrían tener que abandonar las actividades sociales y recreativas para descansar el fin de semana. Si los síntomas son severos, pueden incapacitar gravemente a las personas de tal modo que no puedan salir de la casa.

Síntomas del síndrome de fatiga crónica

El síndrome de fatiga crónica causa un cansancio extremo que es diferente al cansancio normal que todas las personas tienen. Hace que usted sea menos capaz de enfrentar niveles de actividad que antes eran habituales para usted, en su trabajo, escuela o vida social. Incluso la actividad física de todos los días, como tomar una ducha, puede hacerle sentir exhausto.
 
Los síntomas comunes del síndrome de fatiga crónica, los cuales pueden ocurrir entre 24 a 48 horas después de una actividad física o mental, incluyen:

  • fatiga que dura más de 24 horas a un nivel al que usted estaba acostumbrado antes sin sentir cansancio
  • dolor articular y muscular
  • ganglios doloridos en su cuello o axilas
  • dolor de garganta y dolores de cabeza
  • olvido, pérdida de memoria, confusión o dificultad para concentrarse
  • trastorno del sueño: despertarse cansado o tener problemas para conciliar el sueño
  • síntomas similares a la gripe
  • palpitaciones (sentir que los latidos golpean su pecho)
  • mareos
  • sudor
  • problemas de equilibrio
  • síntomas del síndrome de intestino irritable, como estreñimiento o diarrea e hinchazón
  • con el tiempo, usted podría tener depresión o cambios de humor repentinos

Los síntomas pueden variar a lo largo del día y algunos días pueden ser peores que otros. La mayoría de las personas con síndrome de fatiga crónica sienten que sus síntomas van y vienen a menudo regresando después de una enfermedad o estrés.

Estos pueden comenzar después de haber estado enfermo con una infección o pueden desarrollarse gradualmente a lo largo de meses o años.

Si usted tiene alguno de ellos, consulte a un médico.

Causas del síndrome de fatiga crónica

Los médicos no comprenden totalmente la causa del síndrome de fatiga crónica.

Algunas personas lo desarrollan después de una infección, pero no es igual al cansancio normal que suele sentirse después de una enfermedad, como fiebre glandular (mononucleosis). Muchas personas que desarrollan el SFC/EM anteriormente eran activas y estaban en forma.

Existen varias teorías para explicar el síndrome de fatiga crónica. Por ejemplo, puede estar ligado a trastornos del sistema inmunológico (que ayuda a que su cuerpo combata las infecciones) o al sistema hormonal.

Diagnóstico del síndrome de fatiga crónica

Es importante tener un diagnóstico de síndrome de fatiga crónica lo antes posible para obtener el tratamiento y la ayuda adecuados. Sin embargo, el SFC/EM es una enfermedad difícil de diagnosticar, de modo que es posible que tenga que visitar varias veces al médico antes de tener un diagnóstico.

Su médico podrá hacer un diagnóstico una vez que haya descartado otras posibles causas de sus síntomas y que usted haya tenido los síntomas durante al menos cuatro meses. Mientras tanto, su médico podrá ayudarle a controlar sus síntomas.

No existen exámenes específicos para detectar el síndrome de fatiga crónica. Su médico le preguntará cuáles son sus síntomas, le examinará y le hará preguntas sobre su historia clínica. Hay muchas otras enfermedades que pueden causar síntomas similares al SFC/EM y su médico le hará análisis de sangre y de orina para descartar estas otras enfermedades.

Podrían remitirlo a un médico especializado en la enfermedad. Los niños con la enfermedad generalmente serán remitidos a un pediatra (un médico que se especializa en la salud de los niños).

También le brindará información sobre el síndrome de fatiga crónica y sobre los tratamientos disponibles.

Grados del síndrome de fatiga crónica

Se habla de tres grados de enfermedad:

Grado I– Leve. La actividad del paciente se reduce a la mitad de lo que hacía antes.
Grado II – Moderado. Actividad reducida a una tercera parte de lo que hacía antes. Más tiempo en su domicilio.
Grado III – Grave. Sin poder hacer ni una mínima actividad continuada. Más tiempo en cama.

Tratamiento del síndrome de fatiga crónica

El tratamiento del síndrome de fatiga crónica se enfoca en ayudar a controlar sus síntomas. Su tratamiento dependerá de sus síntomas específicos ya que no existe un tratamiento único que funcione para todas las personas.

Su médico o especialista revisará su tratamiento con regularidad. Puede recomendarle una o más de las siguientes opciones de tratamiento.

Autoayuda

Los trastornos del sueño pueden demorar su recuperación. Si tiene problemas para dormir, trate de adoptar una rutina para acostarse a la misma hora todas las noches. Pruebe tomar un baño caliente y relajante o tomar leche antes de irse a la cama.

El manejo de actividades es una forma de manejar su estilo de vida. Le ayuda a priorizar ciertas actividades para encontrar un nivel de actividad física y mental con el que se sienta cómodo. 

Luego, puede establecer metas para aumentar gradualmente el nivel de actividad, asegurándose de descansar lo suficiente después de realizar la actividad física y de no excederse para que no implique un retroceso.

Otra técnica en la que se aprovecha al máximo su energía disponible se llama acompasamiento. El acompasamiento implica organizar su día en períodos de actividad y descanso. Al entender mejor sus niveles de energía, tipos de actividad, descanso y con la planificación y establecimiento de metas realistas, usted puede lograr estabilidad y un sentido de control de su día. 

La estrategia de acompasamiento ha demostrado mejorar la capacidad de la persona de afrontar sus síntomas y sus posibilidades de recuperación.

Algunas personas sienten que los masajes y los ejercicios de estiramiento ayudan a aliviar los dolores musculares.

Es importante comer una dieta saludable y balanceada que le proporcione la energía y nutrición que necesita. Algunas personas tienen intolerancia a ciertos alimentos y bebidas, incluyendo el alcohol y el café, o desarrollan síntomas del síndrome de intestino irritable. 

Podría ser una buena idea llevar un diario de su alimentación para ver si algún alimento le provoca síntomas. Evite alimentos azucarados o grasos, especialmente si no puede moverse mucho.

Medicamentos para el síndrome de fatiga crónica

Los analgésicos, como el paracetamol, pueden ayudarle a aliviar el dolor muscular y de articulaciones, los dolores de cabeza y otros síntomas físicos.

Una baja dosis de antidepresivos puede ayudarle con el sueño o los dolores musculares incluso si no se siente deprimido. Si se siente deprimido, su médico puede recomendarle una dosis más alta. Lea siempre el prospecto de información al paciente que viene con el medicamento, y si tiene preguntas, consulte al médico.

Terapias de conversación

La terapia cognitivo-conductual (TCC) es un tratamiento psicológico a corto plazo. Mediante un conjunto de técnicas estructuradas, el profesional de TCC procurará modificar los pensamientos y comportamientos que puedan obstaculizar su recuperación. Puede resultar especialmente útil si tiene problemas para manejar y ajustar el ritmo de su actividad física y mental.

Si su médico le remite a un especialista en TCC no significa que crea que su cansancio crónico sea "imaginación" suya. Existe evidencia que demuestra que la TCC es un tratamiento efectivo para el síndrome de fatiga crónica y para mejorar los síntomas.

Terapias físicas

Una terapia de ejercicio gradual (TEG) significa comenzar con una actividad que pueda realizar cómodamente, como caminar, y después aumentar el nivel de actividad poco a poco. El tratamiento debe ser ofrecido por un terapeuta capacitado en TEG. La evidencia muestra que puede reducir el cansancio, mejorar su estado físico y aumentar su resistencia.

Terapias complementarias

Muchas veces a las personas con síndrome de fatiga crónica se les recomiendan terapias complementarias, como terapia de relajación, remedios naturistas, homeopatía y diversos suplementos alimenticios. Algunas personas podrían encontrarlas útiles, pero existe poca evidencia científica que muestre que son efectivas.

La disponibilidad y el uso de los distintos tratamientos pueden variar de un país a otro. Consulte a su médico acerca de sus opciones de tratamiento.

Vivir con el síndrome de fatiga crónica

El síndrome de fatiga crónica afecta a las personas de distintas formas. En algunas personas, los síntomas mejoran con el tiempo y otras se recuperan totalmente. Desafortunadamente, para otras personas la enfermedad sigue afectando sus vidas y necesitan mucho apoyo.

Usted puede efectuar algunos cambios en su estilo de vida para ayudarle a vivir con el agotamiento crónico. Estos incluyen lograr un balance correcto entre su nivel de actividad y de descanso, utilizar programas supervisados de tratamiento, como el manejo de actividad y TEG. Además, puede cambiar su rutina diaria, de modo que obtenga suficiente sueño de buena calidad.

Padecer el síndrome de fatiga crónica puede tener un gran impacto en muchos aspectos de su vida, incluidas sus relaciones con sus seres queridos. Puede sentirse frustrado y molesto si las personas no entienden lo exhausto que se siente y lo poco que puede hacer. 

Algunas personas con esta enfermedad sienten que los demás creen que ellos exageran sus síntomas porque no parecen estar mal físicamente.

Tal vez le resulte útil hablar con otras personas afectadas por el síndrome de fatiga crónica. Su médico podrá darle detalles para contactarse con grupos de apoyo. Estos grupos de apoyo también podrán informarle sobre los tipos de ayuda financiera a los que podría tener derecho si ya no puede trabajar.

Preguntas y respuestas

Preguntas

Hay algunos motivos para preocuparse de que el niño tenga una reacción a las vacunas, lo que puede provocar que sus síntomas empeoren o regresen (recaída).

Explicación

Algunas personas con síndrome de fatiga crónica pueden reaccionar a las vacunas, pero no se sabe con certeza. Deberá considerar qué tan esencial es la vacuna, los posibles efectos de no dársela y los efectos que la vacuna puede tener en los síntomas del SFC/EM del niño. El National ME Centre (Centro Nacional de EM) sugiere que sería bueno esperar hasta que los síntomas del niño permanezcan estables por un tiempo, sin un ataque serio, antes de darle las vacunas. Sin embargo, si la vacuna es potencialmente para salvar la vida o es esencial, entonces el síndrome tiene menos prioridad.
 
Se cree que distintas vacunas causan diferentes niveles de reacciones. La reacción es específica a la vacuna que le dieron al niño y a sus síntomas. Si el niño necesita una vacuna, consulte con su médico de cabecera.

Respuesta

En la actualidad no se conocen las razones exactas por las que se puede desarrollar síndrome de fatiga crónica. Esto dificulta saber los efectos del SFC/EM en la mente y el cuerpo. Pero, esencialmente, no se pueden separar los síntomas psicológicos y los físicos del síndrome. Los síntomas psicológicos pueden tener causas físicas subyacentes y viceversa.

Explicación

Una serie de factores pueden estar involucrados en el desarrollo del síndrome de fatiga crónica. Las investigaciones primero se enfocaron en el SFC/EM como un trastorno cerebral (psicológico y psiquiátrico). Los tratamientos con medicamentos que afectan el cerebro no han tenido éxito y las investigaciones han señalado que el síndrome de fatiga crónica no debería ser clasificado como un trastorno psiquiátrico ya que podría no serlo. De hecho, no es fácil en lo absoluto clasificar al SFC/EM. Además de cansancio extremo, también existen síntomas físicos, como el dolor de garganta, dolor muscular y de articulaciones, y glándulas del cuello inflamadas. No se conoce qué provoca esta variedad de síntomas.
 
Se cree que el estrés físico y psicológico puede desencadenar el síndrome de fatiga crónica. El estrés provocado por acontecimientos de la vida, como la muerte de un familiar o la ruptura de una relación, se vinculan al SFC/EM. Tres de cada cuatro personas con síndrome de fatiga crónica tuvieron un resfrío/gripe o la infección viral de Epstein-Barr, que creen provocó el SFC. Esto sugiere que el SFC/EM podría estar asociado con el sistema inmunológico. Algunos estudios han mostrado que el SFC/EM podría estar vinculado a cambios hormonales debido a cambios en los niveles de ciertas hormonas. Además, se han visto cambios en la estructura cerebral, lo que puede significar que el sistema nervioso puede afectarse en el síndrome de fatiga crónica. Su sistema inmunológico, hormonas, sistema nervioso, como también la genética, pueden ser un factor en el SFC/EM.
 
Hasta que no se realicen más investigaciones, la Organización Mundial de la Salud ha clasificado al síndrome de fatiga crónica como una enfermedad neurológica, aunque el Departamento de Salud dice que sería mejor considerarlo como un espectro de enfermedades que se desencadenan por diferentes factores en personas que tienen una predisposición subyacente.

Respuesta

Es difícil diagnosticar el síndrome de fatiga crónica. No existen pruebas para confirmarlo debido a que la causa es desconocida.

Explicación

El médico le realizará pruebas para descartar otras enfermedades que pueden provocar síntomas parecidos, como el hipotiroidismo. Es importante asegurarse de que los síntomas no son causados por otra enfermedad.
 
Una vez que se han descartado otras enfermedades y usted ha padecido síntomas durante cuatro meses, se puede realizar un diagnóstico de síndrome de fatiga crónica. Generalmente, un pediatra (un médico que se especializa en la salud de los niños) podrá diagnosticar a los niños y jóvenes después de haber tenido síntomas durante tres meses.

Más información

The ME Association
0844 5765326
www.meassociation.org.uk

National ME Centre
01708 378050
 

Invest in ME
www.investinme.org
Association of Young People with ME (AYME)
0845 123 2389
 

Action for ME
0845 123 2380
www.afme.org.uk

Fuentes

  • Chronic fatigue syndrome and myalgic encephalopathy (CFS/ME) – suspected. Map of Medicine. www.eng.mapofmedicine.com
  • Simon C, Everitt H, van Dorp F. Oxford handbook of general practice. 3ª edición. Oxford: Oxford University Press: 583
  • About M.E. Action for ME. www.actionforme.org.uk
  • Mental or physical classification – WHO decides? ME Action. 
  • The symptoms and diagnosis of ME/CFS. The ME Association. www.meassociation.org.uk
  • Pediatric chronic fatigue syndrome. eMedicine. www.emedicine.medscape.com
  • Vaccinations. Association of Young People with ME. 

Esta información fue publicada por el equipo de información sobre la salud de Bupa, y está basada en fuentes acreditadas de evidencia médica. Ha sido sometida a revisión por pares, por parte de médicos de Bupa. Este contenido se presenta únicamente con fines de información general, y no reemplaza la necesidad de consulta personal con un profesional de la salud calificado.

Fecha de revisión: 2021